La venta de una casa heredada siempre puede ser un auténtico dolor de cabeza, sobre todo, si las circunstancias en las que se realiza no son las más idóneas. En Paz Montero hemos recibido muchas preguntas acerca de este tema, y es de ello de lo que hablaremos en este nuevo artículo.
Como decimos, en nuestro despacho de procuradores de Galicia vemos muy frecuentemente los muchos problemas que suelen surgir a la hora de realizar la venta de una casa heredera cuyos herederos son varios. Especialmente si no existe acuerdo entre ellos.
Siempre hay alguien que no está de acuerdo, y es en este momento en el que comienzan las dificultades, pues en este caso, no decide la mayoría.
Venta de una casa heredada: ¿qué ocurre si no hay acuerdo entre todos los herederos?
Es importante señalar que, en el momento de plantear la venta de una casa heredada, si uno de los herederos opta por no vender su parte, los otros no pueden obligarle a hacerlo, por lo que hay que buscar otras fórmulas.
Una manera de solucionarlo es recurrir a la subasta, pero no es lo más aconsejable, y antes de llegar a este punto se deben intentar otras opciones, como las que mostramos a continuación.
Realizar la división de dicha herencia
Esta opción implica que se contratan los servicios de un tasador. Este definirá el valor de la casa y repartirá el precio entre todos los herederos legítimos. El heredero que está en desacuerdo con la venta de una casa heredada podrá comprar la parte de los demás. Eso sí, ni los demás pueden obligarle a vender, ni él a ellos.
Hacer uso de la mediación profesional
En este caso, un mediador ayudará a llegar a un acuerdo entre todas las partes implicadas, principalmente con el heredero que no desea desprenderse de su parte.
Sin embargo, es muy posible que estas opciones no funcionen, y en ese caso, habrá que recurrir a la vía judicial para resolver el problema.
¿En qué consiste la vía judicial para la venta de una casa heredada?
El objetivo de la vía judicial es eliminar la copropiedad para poder subastarla. En cualquier caso, habrá que tasar el valor de la casa. Es importante saber que si se elige esta opción será necesaria la participación en el proceso de abogado, procurador y perito o tasador. Por lo tanto, esto implica que vas a tener que hacer frente a gastos que no es necesario afrontar con otras opciones.
Cuando la casa ya está tasada, se subasta. En este momento, los herederos pueden hacer sus pujas sin pago previo de fianza, y en el caso de que haya otros interesados en el inmueble, estos sí deberán abonar un 30% del precio de la vivienda antes de pujar.
¿Cuáles son los posibles escenarios que se pueden encontrar?
Una vez la casa heredada está en subasta pública, pueden ocurrir dos cosas: la primera es que la venta de la casa heredada se dé por finalizada con la compra de la misma por parte de otra persona que no es heredera. En este caso, la herencia se parte y cada uno recibe la cantidad de dinero que le corresponde.
Pero también puede ocurrir que sea el comprador uno de los herederos. En este supuesto, el que compre el inmueble tendrá que pagar la parte que le corresponde a cada heredero.
A modo de conclusión
La venta de una casa heredada puede ocasionar muchos problemas entre los mismos herederos en el caso de que no exista conformidad entre ellos.
Es bueno saber que, si existe la posibilidad de vender la parte es mejor hacerlo a otro heredero, ya que de esta forma no será necesario cambiar de titularidad, y te ahorrarás dinero.
Sin embargo, en nuestro despacho de procuradores en Galicia siempre recomendamos buscar consejo especialista en este tema, ya que el proceso hasta conseguir la venta puede ser largo y complejo.
Si tienes cualquier duda o cuestión en la que podamos asesorarte, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Estaremos encantados de echarte una mano en todo lo que podamos.