Concurso de acreedores: Procedimiento y características

En este artículo trataremos el concurso de acreedores. Para aquellas personas que desconozcan qué es exactamente y qué significa este término, diremos que se trata de un proceso mediante el cual se hace que un deudor que no tiene solvencia económica pueda satisfacer en la medida de lo posible a sus acreedores. Si tienes dudas acerca de este proceso, lo mejor es consultar con un experto legal en Santiago de Compostela.

Al haber, en este caso, varias personas distintas que tienen que cobrar deudas a la persona insolvente, puede ser literalmente imposible satisfacer esos pagos. Es por ese motivo que mediante la aplicación de este procedimiento se busca la consecución de lo siguiente:

  • La oferta de varias alternativas para hacer el pago y que así pueda continuar realizándose la actividad económica
  • Proporcionar una solución que satisfaga de forma parcial a todos los acreedores
  • En el peor escenario posible, liquidar el patrimonio de la persona con la deuda para pagar esta.

Concurso de acreedores: consideraciones a tener en cuenta

El concurso de acreedores, como ya hemos mencionado anteriormente, es un mecanismo que persigue el pago de las deudas de una persona. No obstante, también se puede ver como una segunda oportunidad y protección para el cobro de créditos.

Si hablamos del concurso de acreedores para el pago deudas, éste garantiza el cobro igualitario de los acreedores. El principio rector del mismo es el par conditio creditorum, que evita que quien primero reclama la deuda haga que los demás no cobren su parte.

Igualmente, el concurso permite que la actividad empresarial continúe, lo que proporciona a la misma una oportunidad para evitar el cierre de la empresa y las consecuencias de la clausura para los trabajadores. Por último, pero no menos importante, el concurso de acreedores en Galicia permite que el cobro de algunos créditos específicos prevalezca, con lo que trabajadores y Administración disponen de prioridad.

¿Solamente las empresas pueden hacer uso de él?

La respuesta a esta pregunta es no. Aunque es cierto que son las empresas las que lo usan principalmente, los particulares también pueden usarlo.

¿Cuándo se declara?

El empresario lo solicitará en situación de insolvencia, ya sea inminente o actual. Si no lo hace, serán los acreedores los que podrán pedir su inicio. Por ley, el concurso de acreedores se declara desde que se constate la imposibilidad de pagar la deuda. Las implicaciones que conlleva son la imposibilidad de pagar íntegramente sus deudas. Una vez se constate la situación de insolvencia, la empresa tendrá un plazo de dos meses para entrar en concurso voluntario. Otra opción es negociar la refinanciación. De esta forma, podría aumentar el plazo.

Fases del concurso de acreedores

El concurso de acreedores tiene 4 fases, pero no todas tienen porqué llevarse a cabo. Si el proceso se vuelve a abrir, se concurre directamente a la tercera fase. Cada uno de los concursos tiene sus propios cauces.

Fase 1: actos previos

En esta fase se presenta la solicitud de iniciación, la documentación requerida y los pasos iniciales del proceso. Igualmente, es posible solicitar algunas medidas cautelares y llevar el auto de admisión a trámite, que es lo que marca la apertura de la siguiente fase.

Fase 2: fase común

Esta fase obliga a las partes y a sus relaciones jurídicas.

Obliga al deudor a colaborar limitando sus facultades de patrimonio. En los voluntarios, será necesario que la administración concursal le autorice a disponer de él, mientras que si es necesario será la administración la que ejercite cualquier disposición sobre el patrimonio. Por otro lado, limita la capacidad de reclamar de los acreedores. Cualquier ejecución se paraliza para conservar el patrimonio de modo que se puedan respetar el orden de cobros.

Podemos afirmar que esta fase pretende establecer el alcance del concurso y permitir que el patrimonio pueda aplicarse al mismo.

Fase 3: resolución

Se puede resolver un concurso de acreedores en Galicia mediante un convenio, que se puede presentar de forma anticipada. Su misión es acordar una forma de pago con los acreedores. Para ello será necesaria la aprobación del juez, y se seguirá el cumplimiento del mismo. Otra forma de resolver es liquidando el patrimonio para poder pagar la deuda en la medida que sea posible.

Fase 4: calificación

El concurso de acreedores se puede calificar como culpable o fortuito en base a sus circunstancias concretas y específicas. Esta solo se aplica en casos de liquidación, incumplimiento o aprobación de convenios lesivos para los acreedores.

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